CUBA: ¿KLEPTOCRACIA O DEMOCRACIA?


Ya es hora de cambiar los términos de la disyuntiva cubana. Por demasiado tiempo se ha hablado de la transición, del gradualismo, de ser civilizados, del perdón, del borrón y cuenta nueva etc.

Innumerables profesores, senadores, representantes, ministros y amigables componedores de todos los bandos políticos y países del planeta han visitado a Cuba, hablado con los que allí desgobiernan y dado su opinión . Todos dicen lo mismo en diversas formas. Que si arreglaron a las buenas aquí o acullá, que si en Cuba podría pasar la misma cosa, que por qué Castro no se civiliza y cambia, bla, bla, bla.

Francamente aburrido por lo monótono. Deberían por lo menos aportar alguna idea nueva para justificar el viaje (usualmente invernal). Ya está más que claro para cualquiera con un ápice de buena fe y sentido común que Castro no desea ningún de tipo de arreglo que no sea a su manera: Ustedes obsequian y yo recibo. Lo que hago en mi finca es asunto mío.

Esto nos trae al meollo del asunto. Le pedimos al lector que mire a su alrededor y observe los países donde la impunidad ha imperado y la transición careció de la más elemental base institucional.

Comparen por ejemplo Rusia con Chile o Argentina o España. Con los defectos que se le quieran achacar al proceso de los tres países que contrapongo a Rusia, que vemos sino progreso institucional contra barbarie. Gangsterismo contra civilismo. ¿Y por qué?

Porque había alguna base institucional y algún elemento de control que ejercía presión sobre el cuerpo social. En el caso de España era la Unión Europea a la cual ansiaban incorporarse, en el caso de Chile era integrarse aún más al mercado latinoamericano y arreglar sus diferendos con Estados Unidos que presionaban al gobierno de Pinochet. Circunstancias similares presionaban a Argentina.

Y no hablemos de Europa Oriental que tenía una tradición occidental y civilizada que el ejército ruso suprimía. Además la presión internacional era tremenda y el aliciente de unirse al resto de Europa irrefrenable. Encima de esto hubo una actitud valiente y decidida de la Iglesia en Polonia. Todas esas presiones concedían espacio a los que luchaban contra los regímenes e intimidaban a los mandones de turno que temían el futuro. Sólo por temor aflojaban las cuerdas. Sólo por la esperanza de poder vivir en su país sin ser execrados negociaban.

¿Bueno, pues donde están esos cubanos castristas con los que se puede negociar y hacer la famosa transición? ¿Dónde está la buena voluntad? Sólo vemos más insolencia y más reto a todos y a todo.

¿Y con Cuba cuáles son las presiones? Fuera del embargo americano, que es más que nada una sanción moral y un freno al inversionista sin escrúpulos, no hay prácticamente nada. ¿Y aún esto lo quieren dar de gratis los gradualistas académicos y de otro corte sin concesiones por los castristas? ¿Es que no leen la historia contemporánea ni los procesos recientes para saber como ocurrieron? En todos los casos hubo un quid pro quo substancial. Además en los países mencionados nunca penetró el comunismo en tal forma que obliteró la propiedad privada al nivel cubano ni que exigió una conformidad tan absoluta del pueblo. Y ni hablar de la degradación que conlleva el turismo sexual y demás formas de "resolver." Quiere decir que en Cuba en teoría tendría que haber más y no menos concesiones porque si no, no adelantaríamos casi nada en términos prácticos.

En teoría dije, y lo dije por una razón. No creo que este equipo castro-gangsteril pueda sentarse con nadie a discutir nada. Están demasiado inmersos en una podredumbre tan absoluta que son incapaces de reaccionar normalmente. Son ya una Kleptocracia organizada, dedicada a esquilmar al pueblo, vender barato el país y subsistir. Los datos y evidencias son abrumadores y no vale la pena repetirlos.

Un arreglo incondicional traería un proceso a la Rusia. Sería el reconocimiento del gangsterismo como forma de gobierno. Sin Tribunales independientes, sin jueces, sin instituciones, con una "privatización" amañada en la que se repartirían entre ellos y lo peor del capitalismo internacional todo el país. De hecho ya lo vienen haciendo. Sólo aumentarían el proceso de la piñata castrista y lo harían más visible. Y para cerrar nos inventarían unas elecciones y unos partidos controlados pues habría que vestir la mona.

Resultado: más pobreza para el pueblo y en su momento estallido popular, ajustes de cuentas, y venganzas. ¿Y eso, señores que pretenden razonar, es transición o es apoyar la Kleptocracia contra la Democracia?

Porque sin un cambio radical es lo único que ocurriría, y una Cuba con una Kleptocracia desvergonzada, institucionalizada y apañada por los inversionistas sin escrúpulos me repugna aún más que la Kleptocracia vergonzante de Castro.

Amigos, el día que la Kleptocracia cubana pueda acceder libremente al mercado americano y recibir los turistas de este país sin cortapisas, hará tres cosas. Primera, aceptará los turistas que les parezca manteniendo un control de visas. Segunda, mantendrá su sistema de contratación laboral abusivo y hará negocio con aquéllos a los que no les importe el tema. Tercera, se mezclará en cuanto negocio sucio pueda existir en Estados Unidos. Tendremos una sucursal de la mafia rusa a 90 millas. Sí, esa misma que lavó 10 billones en un sólo operativo a través del Bank of New York y que por lo que se vislumbra está profundamente enquistada en el sistema financiero internacional. Los cubanos han sido aventajados discípulos de los rusos. Esperen pues mayores y mejores timos.

No, no hay que ser Einstein para razonar lo que antecede. Así que por favor empecemos a hablar de Democracia vs. Kleptocracia, de distracción de fondos vs. ayuda exterior, de mentalidad mafiosa vs. mentalidad negociadora de buena fe.

Hablemos en fin en términos sencillos a nuestros amigos norteamericanos y cubanos mal informados. Esto ya está más claro que el agua. Hay que esperar la explosión que viene porque no queda ninguna otra alternativa. Y viene por razones inevitables. El régimen es desordenado, derrochador y altanero. No puede crear nada ni resolver nada. Solo puede robar y abusar. Y eso tiene un límite.


FIN


Dr. Alberto Luzárraga

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