EL DETERIORO MILITAR CASTRISTA

Por Mario J. Byrne


El tan anunciado desfile militar del dos de diciembre resultó al final algo patético. Especialmente si lo comparamos con las antiguas paradas militares del castrismo de la década de los sesenta. En la parada se intuía un ambiente, no sálo de despedida al agonizante “máximo lder” , sino también de apuro, como si todos se dieran cuenta de que la cosa no,iba en serio y que, cumplido el compromiso había que irse de regreso a casa lo más pronto posible. No era sólo el locutor repitiendo la palabra “adelante”, sino el ambiente de precipitación que se notaba por todas partes, incluídas las fuerzas militares.

Lo que me llamó la atención en el desfile fue la ausencia de una unidad completa. Se trató de una parada de muestras, por así decirlo. En las antiguas paradas militares castristas, yo llegué a contrar cuarenta tanques del mismo tipo, ya fueran T-55 ó T-62

( un regimiento de tanques se constituye por cuarenta o cincuenta unidades) y en ésta apenas si aparecían seis ZSU-23-4, antes de que otro blindado lo sustituyera. En el ejército francés, por poner un ejemplo, un regimiento de tanques pesados está formado por cincuenta unidades y uno de carros blidados, por cuarenta y ocho. Si, por ejemplo, una unidad de ésas va a desfilar el 14 de Julio, por lo menos dos escuadrones ( diez o doce unidades) pasan por los Campos Elíseos., identificados e identificables por sus banderas e insignias. Esto sugiere que en el ejército castrista hay problermas de manteniemiento y logística, lo que no es de extrañar, dada la lejanía de las fuentes de abastecimiento y la enorme deuda pendiente con Rusia.

El anuncio de que los tanques (T-62) han sido modernizados en Cuba y de que se les ha añadido un cañón de 73 mm. a transportes blindados de personal tiene inevitablemente un carácter artesanal, por la sencilla razón de en Cuba no existe una industria metalúrgica pesada capaz de estos trabajos. Además, el equipar con cañones a los transportes de tropas sugiere escasez de tanques. Aparentemente, el mantenimiento no es gran cosa, porque uno de ellos “se encangrejó” frente a la tribuna…

En la aviación, la crisis es aún más grande, dada la naturaleza del arma. De los cinco aviones que pasaron sobre el desfile, dos o tres eran Mig-29, el resto MiG-21 o 23 (yo sólo pude identificar un MiG-23). Si no pueden poner en el aire ni siquiera cuatro aviones del mismo tipo, no pueden constituir una sola escuadrilla homogénea ( de las tres que generalmente incluye un escuadrón de doce). Para los desfiles, las escuadrillas (de cuatro máquinas) por lo general asumen la formación “diamante” , que difiere de la formación “mano” que es la preferida en el combate. Ya se sospechaba lo anterior, cuando el derribo de los aviones de los “Hermanos al Rescate”, en él que participaron un MiG-23 y un MiG-29. Aparentemente no había dos máquinas iguales que confiarles a los hermanos Pérez y Pérez para que consumaran su crimen. Por cierto, que el derribo de uno de los dos aparatos Cessna de “Hermanos al Rescate” es la única victoria aérea ( hasta donde llega mi información) atribuíble al MiG-29. En cuanto a una posible ayuda futura de Chávez, la cosa es poco probable, ya que los aviones que está comprando en Rusia, no son MiG-29, sino SU-30.

La marina, la pobre cenicienta de la historia militar cubana ( y sin embargo la única arma de la República que lograra una victoria legítima en una contienda bélica), ha prácticamente desaparecido. Quedaron atrás los días en que Unión Soviética suministraba generosamente unidades ligeras lanzacohetes ( las OSA y las Komar). La idea de las lanchas lanzacohetes surgió en Rusia, donde siempre han buscado soluciones baratas a problemas complejos ( recordemos los perros antitanques) y demostró su efectividad hundiendo al destructor israelita “Eilat” en la “Guerra de los Seis Días”. Cuba se convirtió así en la primera nación del Hemisferio Occidental en poseer esa arma y llegó a tener alrededor de treinta unidades., de las que al parecer no queda ninguna en servicio.

De manera que los cadetes de la academia naval se entrenan si caso para manejar un lanchita “Zhuk” del Ministerio del Interior. La “Crisis de Octubre” terminó con los sueños navales de Castro, porque los norteamericanos vetaron la entrega de seis destructores de la clase “Skory” que hubieran hecho de la marina cstrista la más ponderosa del Caribe. Sic transit gloria mundi…


Fort Lauderdale, 3 de diciembre del 2006

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