SOY TREMENDO JODEDOR

Por Ralph Rewes


He batido un altísimo número de récords. No sólo los que me fabrican aquí en los deportes los lamebotas masoquistas que me rodean. No. He batido récords de verdad. Permanencia en el poder. Confrontación con los yanquis. Burlas a los Europeos. Haberles tomado el pelo a todos los gobiernos latinoamericanos que creen en lo que digo cuando digo mentiras y no me creen cuando les digo verdad. He hecho de todo, aquí en América, en África. No me ha quedado nadie en el tablero sin insultar, vejar, traicionar, vender. Y hasta yo me asombro, cómo es posible que todavía puedan sentir cierta admiración maricona hacia mí después de todo esto.

He vendido todo lo del país, desde cosas del patrimonio nacional, hasta jineteras a los turistas. He vendido guerrilleros a gobiernos de derecha. He vendido derechistas a gobiernos de izquierda. He entrenado terroristas y después los he cambiado por apoyo político. Soy todo un genio de la perfidia. Y eso parece que le gusta a la humanidad, porque me admiran muchísimo.

No hay admirador que en un momento u otro los haya insultado. Me he cansado de decirles «negros de mierda» a los africanos y vean ustedes: son los que más me apoyan. Les quemé las aldeas llenas de negros a los angoleños y la lista de negros muertos es enorme, pero para la humanidad eso no cuenta, por eso al güititío de Sudáfrica se le cae la baba de admiración por mí y me ayuda tanto.

Con los mexicanos son con quienes más juego. Prohibí la música mexicana en la radio cubana, porque era de mal gusto. Y le vendo artistas y las pajarerías del trovador y las idioteces del cantautor poético al por mayor. Hago tratos con el Partido Comunista Mexicano para joder al gobierno, con las guerrillas para joder al Partido y al Gobierno y con el gobierno, para joder al Partido Comunista Mexicano. Y todos me adoran. Y ahora juego con los zapatistas para joder a todo el mundo. Y el gobierno mexicano es mi más fiel servidor. Nadie entiende esto. Yo sí, porque soy tremendo jodedor.

Ah, la madre patria, no ha habido chantaje que no le haga. Pero con ese sentido de lo religioso de los españoles no puedo perder. Porque ellos adoran a quienes insultan o insultan a quienes adoran. Y por eso creen que cuando les insultan es que le están adorando. ¡Qué gallegos más comecagás!

Me cagué en la madre de Mao y él se fue pa'l carajo y yo me quedé jodiendo. Comentaba que a los chinos deberían enlatarlos para alimentar a la humanidad y he ahí todavía me apoyan. Achuchaba a los rusos contra los chinos y me burlada de su color amarillo y de lo mal que vestían. Soy tremendo jodedor... a la verdad. Me he limpiado el culo con la reputación de una tonga de presidentes americanos, y todavía creen que un día yo voy a cambiar. Hay que ser verraco. Pero la humanidad es así.

Al del sombrerón se la cepillé para que no me fuera a hacer sombra. Al hermano lo convertí en un asesino que mató a contrarrevolucionarios ahogándoles en una rastra. Y ahora se lo empujo por las narices a los ejecutivos turísticos extranjeros para hacer que se muerdan la lengua y tengan que lidear con quien yo les diga. Al brujo economista lo mandé a joder a otro lado para que me sirviera de mártir y de postalita en las camisas y puloveres. Lo convertí en un verdadero Mickey Mouse que me da otra entradita más.

Los rusos pensaban cogerme el culo, pero se jodieron. Del gordito guajiro de mierda me burlé con cojones y lo hice hacer el ridículo más grande que ruso alguno después de Rasputín haya hecho.

Me burlé y me meé de la risa con el ridículo que le hice pasar a la bruja narizona, al tapón radial y a toda esa caterva de avariciosos que por dinero hacen cualquier cosa, hasta la babosería más extrema. Y ahí están, alabándome todos los días.

Y lo que me divierto echando a pelear al mosquito cabezón con el niño bitongo postalita. Y los dos me admiran muchísimo, por retrasados mentales que son. Como si yo pudiera apreciar el trabajo de los demás. Par de comecagás. Cuando me empezaron a criticar que no había un niche en el Partido (para lo que sirven, si no la hacen a la entrada, la hacen a la salida los negros de mierda estos), tuve que poner a un gorila de adorno. Y ahora, con un negro nada más, los liberales de EUA dicen que estoy racialmente integrado y que no hay racismo. Habráse visto gente más comemierda.

Al colombiano de voz de pito le digo maricón y mira como con griticos le dice a todo el mundo lo enamorado que está de mí. No tiene ni dignidad ni vergüenza, por eso está en la OEA, donde no hay casi nadie con vergüenza ni dignidad. Lo mismo que a ex-embajador bigotudo, que le tengo fotos de él con niños menores, y lo amenazo con entregárselas a la prensa si no me sirve. Menos mal que los americanos no son como los suecos, porque aquel embajador sueco que traté de chantajear con fotos de él y un jinetero y lo que hizo fue pedirme copias para enseñárselas al primer ministro.

Todo el que está cerca de mí, sabe que todos los días me cago en dios y en la virgen cabrona. Les digo que el papa es un viejo caduco y que me lo eché en el bolsillo. Es que sabía que el Vaticano ya tenía inversión en la Compañía de Teléfonos. Meti al cura cuatroojos en la UMAP por maricón y mira cómo me apoya ahora. Le he dado patadas por el culo hasta cansarme a todos los cubanos, y vean cómo vienen en manada a traerme dólares.

Nada que soy tremendo jodedor. Y cuando me muera de viejo, les voy a dejar a todos los arrastraos que me siguieron en mis locuras un país en un estado tan caótico que no lo van a arreglar ni en un siglo. Y un gobierno tan dividido y ambicioso que se van a comer entre sí como hienas y yo desde el infierno me estaré riendo, mientras mi amigo, el diablo me dice: «Verdad, mi socio, eres tremendo jodedor!»

Y los del exilio en Miami cuando muera, me admirarán porque habré jodido a todos sus enemigos. Y me recordarán con cariño. Yo siempre me cuidé de no matar, sino mandar a matar. Por eso nadie tiene nada contra mí. Sino contra mis esbirros. y a esos que se los lleve el diablo. Nadie los mandó a ser hijos de puta. Para hijo de puta, yo.

¡Adivinen quién!... Guess who!

FIN


Ralph Rewes
rolfruhig@home.com

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www.amigospais-guaracabuya.org


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