Ex ayudante de los Castro no revela nada nuevo

por Servando González


Bajo el título sensacionalista de "Ex ayudante de los Castro revela secretos", Oscar Corral, del Miami Herald (El Nuevo Herald, 23 de marzo), le sirve de tribuna a un nuevo hablante, supuestamente ex castrista, a quien, como es de esperar, se le han abierto las puertas en grande. El nuevo hablante es Delfín Fernández, muy conocido en su casa, quien afirma haber sido uno de los guardaespaldas del loco asesino.

Ni cortos ni perezosos, el Canal 41 ya le creó un nuevo programa (¿cómico?) y el ex analista de la CIA Brian Latell corrió a escuchar las nuevas historias -- las viejas están ya un poco gastadas -- las cuales, según afirma el artículo, encontró "casi todas bastante creíbles." Pero hay un pequeño problemas con las historias de Delfín, y es que las nuevas no son ciertas, y las ciertas no son nuevas.

Por ejemplo, el hecho de que la seguridad cubana filma a los inversionistas extranjeros y otros visitantes a la Isla mientras ejecutan sus actos de malabarismo sexual, y que el tirano de mente podrida disfruta enormemente de los vídeos, no es nada nuevo. Si mal no recuerdo, he hablado del tema en los tres últimos libros que he escrito. Sobre lo de que el loco ha ordenado quemar su ropa interior por miedo a que lo envenenen es una entelequia creada por el propio loco para desinformar. La verdad es otra.

En la página 20 mi libro "Historia herética de la revolución fidelista", publicado en 1986, estudio el problema en detalle. En esa página aparecen cinco fotos de Fidel Castro, una tomada en Octubre de 1946, cuando dirigía la palabra a estudiantes de la Universidad de la Habana; otra en febrero de 1947, cuando, ya como líder estudiantil, discutía acaloradamente con un policía; otra en noviembre de 1947, cuando, como líder de la FEU, traía a La Habana la "campana de la libertad", para pedirle la renuncia al Presidente Grau; otra en abril de 1948, tomada durante los disturbios del Bogotazo; y la última en enero de 1949, cuando participaba en una manifestación de protesta contra algo. Lo interesante es que, en esas cinco fotos tomadas durante un período de cuatro años, Fidel aparece usando exactamente la misma corbata.

A lo que que comento en mi libro: "Como nunca se cambiaba la corbata (ver), ni la camisa, ni la camiseta, ni las medias, ni los calzoncillos, ni se bañaba, todo el mundo en la Universidad lo conocía por el sobrenombre de: ¡BOLA DE CHURRE!

Así que, la historia el envenenamiento que el pobre Bienvenido "Chicho" Pérez, el jefe de los guardaespaldas de Castro, le contó al nuevo hablante Delfín, es pura bazofia desinformante. El motivo por el que la ropa de bola de churre hay que quemarla, es que, como todavía el loco le tiene una terrible aversión al agua y el jabón, su ropa interior apesta tanto que no hay quien se le acerque, y es preferible quemarla que lavarla, porque el gasto en agua y detergente sería prohibitivo.

Pero, por supuesto, la verdad del por qué la ropa interior de bola de churre no se manda a lavar no vende, no es dramática, no conlleva el subtexto de que el Loco en Jefe teme que la siniestra CIA lo asesine. ¡Como si la CIA hubiese tratado alguna vez de asesinarlo! Si algo ha hecho eficientemente la CIA es protegerle la vida al Terrorista en Jefe.

Después de expresar su consabida desilusión con el régimen (¿cuánto tiempo le costó desilusionarse?), el nuevo hablante Delfín (aunque me huelo que este no será en realidad el del fin, les aseguro que vendrán otros), afirmó que:

''La idea inicial de Fidel era buena; Batista era un asesino'', aseguró Fernández. Lo que sucedió fue que el camino que tomó con la revolución fue el equivocado. [La revolución] se transformó en esta imparable, insaciable corrupción, sin límites, una gran mentira. La gente vive en la miseria. El pueblo cubano ha sido esclavizado como mano de obra barata para los empresarios extranjeros''.

En primer lugar no sé cómo, a no ser que sea telépata, Delfín pudo saber que la idea inicial del loco era buena. ¿Será porque lo oyó de boca del Caballo? Además, si es cierto que Batista era un asesino, ¿qué son Castro y sus secuaces? Además, la revolución (¿cuál revolución?, más bien es una involución) no se transformó en nada. Desde el comienzo Castro y su gente eran una pandilla de asesinos, mentirosos, ladrones y corruptos. La única diferencia es que al principio la gente lo ignoraba, y ellos se cuidaban bastante para que el pueblo no se enterara. Ahora es vox populi. Ya es imposible tapar el sol con un dedo que no sea el del medio.

Pero hay algo aún más falso en el artículo, aunque no es nuevo. Como todos los hablantes que le han precedido y como todos los que vendrán, Delfín machaca con la vieja cantaleta de que "''A Raúl le gusta el dinero y tiene un plan de transición'', aseguró [Delfín] Fernández. "Fidel no. Creo que Raúl quisiera ir a una transformación económica y, en última instancia, encontrar una forma de retirarse pacíficamente con su familia con todo el dinero que le ha robado al pueblo cubano a través de los años, y que ha sacado del país''

Tal vez a Fidel no le guste el dinero, pero no cabe duda que ha acumulado una cuantiosa fortuna. Pero es evidente que no la usa en comprar jabón y desodorante, sino en crear conflictos y fomentar guerras, que es lo que él más disfruta. Por otra parte, puede ser que a Raúl le guste el dinero, pero torturar, asesinar gente indefensa, y otras cositas, le gusta aún más. La única transformación que Raúl Castro ha tenido siempre en su mente es convertirse él en su hermano, a quien ama y odia con todas las fuerzas de su ser.

Así que, cuando lean las historietas del nuevo hablador Delfín, les sugiero que lo hagan escuchando como música de fondo una guaracha de mi coterráneo Pío Leyva (quien acaba de fallecer): "El mentiroso".



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