EL TRUST CASTRO-COMUNISTA

por Tito Rodríguez Oltmans.

Cada vez que oigo algún compatriota del exilio decir que Fidel Castro es un genio, me dan ganas de enviarlo a que le hagan un MRI de la cabeza para poder ver que es lo que guarda dentro de la cavidad ósea del cráneo. Fidel Castro no ha inventado nada, lo único que ha hecho ha sido abrazarse a la doctrina marxista-comunista para poder mantenerse “ÉL” solo en el poder absoluto, eso si, uso muchas de las tácticas que usaron los soviéticos en la otrora URSS las cuales han sido modificadas para su conveniencia, pudiéndose decir que estos métodos y tácticas han sido “tropicalizados” para la hechura del castro comunismo.

La infiltración de elementos castristas bien entrenados en los grupos combativos de la década de los años sesenta, tuvieron gran éxito por su traición y delación dentro de las filas de los combatientes anticomunistas. Por causa de estos elementos “infiltrados”, cientos de patriotas fueron asesinados ante los pelotones de fusilamiento del “Régimen”, y decenas de miles de patriotas cubanos cumplieron largas condenas de prisión, en los “Gulags” castristas.

Uno de los más siniestros personajes del “Régimen”, fué el Ministro del Interior, José (Pepe) Abrahantes, quien después de haber cursado, en la década de los años setentas, estudios en la escuela de operaciones especiales de la KGB de Balashikha, al este de Moscú, donde aprendió la ampliación de tácticas, métodos y aplicaciones sobre diferentes materias de represión y control, entre ellas: métodos modernos de represión individual y colectiva, así como, la penetración, creación y manipulación de grupos disidentes, desinformación colectiva, preparación y propagación de métodos de decepción, actualización de los tanques de pensamiento del Ministerio, creación, manipulación y control de un posible llamado movimiento de desobediencia civil, la infiltración de periodistas bien entrenados para que trabajen en la prensa de Miami creando opiniones diversas todas favorables al “Régimen”, así como mediante el control de la salida legal del país, infiltrar a ex adeptos y su familia en los grupos del exilio, lugar donde serian bien recibidos y en breve tiempo seguramente fueran desplazando a los exilados que ellos llaman “intransigentes o de línea dura” por estos elementos que una vez, casi todos ellos, bien le sirvieron a “EL”. Muchos de estos elementos serian ubicados en lugares prominentes o claves, por los propios exilados, que no saben como trabaja ese “Régimen”, ocupando espacios donde seguramente crearían problemas internos de división ideológica y financiera.

Luego de la revolución de Octubre de 1917, el régimen bolchevique era amenazado por varios factores. Teniendo Rusia un territorio tan amplio, aún quedaban grandes bolsones de resistencia de fuerzas zaristas. En el exterior, millones de emigrados soñaban con derrocar al régimen bolchevique. Por si esto fuese poco, muchos gobiernos extranjeros veían negativamente el establecimiento de un gobierno comunista, el cual no fue reconocido por las principales potencias europeas.

Después del colapso de la URSS y sus satélites europeos, Abrahantes inicio varios planes de control de opiniones experimentales, todos mayormente dirigidos hacia el exilio cubano de Miami. Entre los planes había varios, que después de la muerte de Fidel Castro por causas naturales, contemplaban a algunos posibles candidatos (escogidos por el MININT) a ser los futuros líderes de un “Gobierno de Transición Pacifica”, compuesto mayormente por miembros de la llamada disidencia interna, desde luego y siempre, dando lugar entonces, a un “Cambio Interno y Ordenado del Régimen”. Este “Cambio” seria manejado por esa “Disidencia”, la cual esta, y estaría totalmente “controlada” por el Departamento 21 del MININT.

Félix Dzerzhinsky fué el creador de la policía política represiva (GPU) del sistema comunista que comenzó a regir en Octubre de 1917, con el triunfo de la Revolución Bolchevique. Una de sus ideas fué la de destruir la contrarrevolución que existía fuera del territorio soviético, representada por los anticomunistas o rusos blancos, que desde su exilio, principalmente en Paris, trataban de derrocar el régimen de terror comunista impuesto por Lenin en la naciente Unión de Republicas Socialista Soviéticas; URSS.

A Félix Dzerzhinsky se le encargó la tarea especial de organizar un servicio secreto para destruir totalmente a la contrarrevolución, y durante algún tiempo elaboró un plan que le permitiera lidiar contra las múltiples amenazas que se cernían sobre la revolución bolchevique.

A Dzerzhinsky se le ocurrió una idea genial. Crear una falsa organización para derrocar al régimen bolchevique, que estableciera contacto con las organizaciones de disidentes controlados por él, y de este modo poder manipular sus actividades. Esta organización fue conocida como el TRUST. Las siglas del alfabeto cirílico dada a la organización ficticia creada por el propio Dzerzhinsky, coincidían con las iniciales de la palabra “T.R.U.S.T.”

Este plan fue presentado a Lenin. Al aprobarlo, pronunció su famosa frase: "Los occidentales piensan lo que quieren creer. Les daremos lo que quieren pensar"

El Trust estaba en marcha.

¿Cómo controlar a la gran cantidad de grupos de emigrados contrarios a la revolución bolchevique?

¿Cómo convencer a las potencias contrarias de no atacar al nuevo Régimen bolchevique radicado en el Kremlin?

Si ellos, los bolcheviques, tan solo pudieran darle a conocer a Occidente, la imagen de un comunismo caótico, desorganizado y próximo a caer, lograrían dar una impresión desfavorable a sus enemigos exilados de los que estaba sucediendo en la URSS.

El Trust tuvo un éxito completo.

Convenció a las potencias extranjeras (cuyas tropas permanecieron en Siberia hasta 1922) de no atacar al gobierno soviético, porque eso lo harían las fuerzas internas.

Atrajo el apoyo de los grupos de emigrados soviéticos y, a través de ellos, a los servicios de inteligencia occidentales. Todos querían anotarse un punto pronosticando a sus gobiernos la pronta caída del comunismo.

Neutralizó la mayor parte de la actividad de los emigrados y la inteligencia hostil. Convenció a varios de sus líderes de celebrar reuniones con la supuesta resistencia dentro de Rusia... reuniones de las cuales nadie volvía, como Sidney Reilly (el famoso "as de espías").

Para mediados de la década del 20, las fuerzas blancas habían sido vencidas y las potencias extranjeras habían abandonado Rusia.

Dzerzhinsky resolvió terminar con el Trust. Pero para eso, dejó filtrar a los servicios de inteligencia Occidentales la verdad acerca de la organización. Con esto, logró desacreditar por completo a los movimientos de emigrados. ¿Cómo confiar en ellos, si estaban infestados de espías soviéticos?

En 1926 Francia y Gran Bretaña reconocieron al régimen comunista y firmaron sendos tratados comerciales. La revolución de Octubre había triunfado.

En 1968 se produjo la Primavera de Praga y Andropov creó el llamado Quinto Directorio para monitorear, controlar y reprimir todo tipo de disidencia.

En Cuba después del colapso de la URSS, se crearon departamentos especializados para la infiltración, control y vigilancia de intelectuales, obreros, estudiantes, y creyentes, para formar en la actualidad la llamada disidencia cubana.

Todo este asunto del TRUST Soviético, más recientemente conocido en la ex URSS como el Quinto Directorio, sustituto directo actual del antiguo Trust, fue implantado, modificado y actualizado en Cuba, primero por el difunto Abrahantes, quien fue amigo personal de Yuri Andropov, y después por los oficiales del MININT a cargo de este importante asunto para el Régimen Castrista.

A pesar de todas sus artimañas, y contando con la reciente alianza llevada a cabo con el régimen totalitario de Hugo Chávez, la cual le inyecta millones de dollares diarios, el castro comunismo tiene sus días contados, por que la dignidad de los todos cubanos decentes de intramuros y del exilio, cumplirán con la obligación patriótica de devolverle a Cuba su dignidad, libertad y justicia.


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